La ciudad nos envuelve cada día entre sonidos atiborrados, paisajes grises y nos lleva a un ritmo acelerado, el cual nos impide tomar un respiro hasta el momento en que llegamos a casa; imagina que al abrir la puerta te recibe un espacio que ta haga conectar con la naturaleza para tomar ese respiro que te hacía falta y poder renovar tu energía al instante después de un largo día.
Si bien no podemos vivir dentro de un bosque, sí podemos lograr un entorno lleno de quietud en casa inspirado en la naturaleza y basado en el diseño biofílico. El término biofilia fue acuñado por el psicólogo Erich Fromm en 1964 y lo definió como “amor a la vida, la pasión por todo lo vivo”. Un concepto que al implementarlo en interiores aporta grandes beneficios.
Estar en contacto con la naturaleza es inherente al ser humano, sin importar lo mucho que hemos evolucionado, aún necesitamos de las estimulaciones que nos aporta el entorno natural para nuestro desarrollo, estar cerca de ella nos ayuda a mantener la salud física, mental y espiritual. El diseño biofílico puede reducir el estrés, mejorar nuestra creatividad y claridad al pensar; mejorar nuestro bienestar y acelerar los procesos de curación.
Estos son 5 patrones de diseño biofíloco esenciales.
Un vistazo a elementos de la naturaleza, sistemas vivos y procesos naturales.
Estímulos auditivos, táctiles, olfatorios o gustativos que generan una referencia deliberada y positiva a la naturaleza, sistemas vivos o procesos naturales.
Una condición que mejora cómo experimentamos un lugar al ver, oír o tocar agua.
Aprovecha la variación de la intensidad de la luz y la sombra que cambia con el tiempo y recrea condiciones que suceden en la naturaleza.
Conciencia de los procesos naturales, especialmente los estacionales y los temporales, que son característicos de un ecosistema saludable.
Conoce los productos en pisos y muros que puedes integrar a este estilo, los cuales te ayudarán a lograr el diseño deseado.