El porcelanato es un producto superior al cerámico ya que cuenta con características dentro de su producción que lo vuelven más fuerte, durable e higiénico. Hoy te queremos compartir algunas de estas características para que consideres utilizar porcelanato en tu hogar ya que se puede aplicar en pisos, paredes, terrazas y prácticamente cualquier superficie.
Su fuerte estructura lo vuelve mucho más resistente a golpes e impactos ocasionados por muebles pesados o bien objetos que se caen y que otros materiales se romperían o cuartean. El porcelanato no sufre este daño, lo único que debes de tener en cuenta siempre es la correcta colocación para evitar bolsas de aire.
Es ideal para pavimentar zonas exteriores ya que los cambios abruptos de temperatura como el calor, frío o incluso lluvia, no afectarán su estructura. También por su dureza, el tráfico de autos no daña su superficie. Esto te permite tener una amplia posibilidad de decoración en tu hogar, especialmente con nuestra tecnología non-slip que vuelve más seguro aún al piso y te permite continuar tu look interior al exterior.
El porcelanato no es poroso por lo que no absorbe el agua. Esto lo vuelve muy beneficioso en espacios más húmedos como baños o al rededor de las albercas. Además, esto también lo vuelve mucho más higiénico ya que nada se queda atorado en los poros y limpiarlo es mucho más fácil y rápido, eliminando con facilidad cualquier virus o bacteria que pudiera encontrarse en su superficie.
El porcelanato nos permite tener una infinidad de acabados que brindan versatilidad a tus espacios, acorde a tu estilo y gusto. Por ejemplo pudieras combinar un look de madera con piedra o mármol, obteniendo los beneficios de cada look sin sacrificar las propiedades que ya compartimos del porcelanato. Esto también te permite delimitar zonas de manera más sutil y elegante.
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